Sobra decir quienes son los propietarios de las plantas nucleares que hay en nuestros países, las cuales han creado supuestamente para
aumentar la eficiencia en producción
de energía que se suministra a cada
ciudad disminuyendo costos y en las cuales es poco importante o nada importante los efectos acumulativos que se dan a mediano y largo plazo.

En sus ciudades hay alguna? en mi caso sí. En fin, después de que explotó la primera planta en Japón después del terremoto producido el 11 de marzo, muchas preguntas están en el aire, nadie se ha pronunciado al respecto de cuáles son las verdaderas implicaciones para la salud humana no solo de los japoneses.

Japón es uno de los países potencia mundial, mayor exportador no solo de motos y automóviles, así como lo oyen, también es uno de los grandes exportadores de alimentos, arroz, sardinas, atún, jugos procesados, sushi, hongos, salsas, pescados, mariscos, carnes, frutas, enlatados entre otros múltiples productos que podrían estar llegando a nuestros hogares después de la tragedia en el afán de arrancar de nuevo para estabilizar la economía de ese país.

Estos son algunos de los riesgos que no nos han contado que podríamos correr en cuando a escapes de material radioactivo, cuáles son las implicaciones de la exposición a radiación nuclear?

El profesor Paddy Regan, experto en radiación y protección ambiental de la Universidad de Surrey, en Inglaterra afirmó que «para las personas que viven en las inmediaciones de las plantas japonesas, el riesgo dependerá del nivel de radiación que se liberó en las explosiones».

Hasta donde se sabe, los informes hablan de niveles menores de contaminación radiactiva. Informes elaborados por quién? talvez para no asustar aún más a la población y evitar un pánico de mayúsculas proporciones. Todos sabemos que no siempre se nos dice la verdad y menos, si esa verdad está publicada en medios televisivos como BBC, ABC, etc. Estos son algunos de esos riesgos que pueden presentarse a largo plazo:

  • En el largo plazo, una exposición moderada a la radiación puede causar problemas de inducción de cáncer, pero por lo general en porcentajes muy bajos de la población.
    Envenenamiento
  • Cuando la persona se ve expuesta a niveles excesivos de radiación se habla ya de envenenamiento por radiación.
  • Este tipo de exposición, llamada radiación ionizante, tiene suficiente energía para ionizar la materia, es decir, interferir con su estado básico y, en el caso del organismo, interferir con el proceso de división celular.
  • Este tipo de radiación causa problemas graves que, después de la primera ronda de síntomas moderados, puede provocar un período breve sin enfermedad aparente.

Sin embargo, pueden ocurrir lesiones potencialmente fatales en los órganos internos, trastornar totalmente el proceso de crecimiento y división de las células. Y los daños que causa la radiación también pueden resultar en cambios o mutaciones en el ADN, los que pueden pasarse de una generación a otra.
La unidad que se utiliza para medir la dosis absorbida de radiación es el gray (Gy). Una exposición a una cantidad de radiación de cuatro Gy suele provocar la muerte en la mitad de los adultos sanos contaminados. Existen medicamentos que pueden incrementar la producción de glóbulos blancos del cuerpo para contrarrestar los daños que pueden ocurrir fortaleciendo en cierta forma el sistema inmunológico. También hay fármacos específicos para ayudar a reducir los perjuicios a órganos internos causados por las partículas radiactivas como el yodo. Aunque por el momento nada de pánico sino vivimos cerca de Japón, «En estas circunstancias es probable que los que estarán más en riesgo son los empleados de la planta nuclear o los trabajadores de rescate si se ven expuestos a altos niveles de radiación», dice el experto
Una contaminación radioactiva puede ser disminuída o eliminarse mediante técnicas especiales de limpieza, mientras que la exposición externa no puede eliminarse, que es cuando entra en contacto con la piel o con alimentos de ser el caso (Cuando se contamina un suelo, las plantas, y los animales que comen estas plantas, pueden a su vez contaminarse.), puede contaminarse también el agua e incluso el aire.


Si bien nos encontramos a una distancia considerable de los eventos de los últimos días, nadie puede garantizarnos que esa contaminación no llegue a nuestros países en mayor o menor medida, no está por demás como manera preventiva en los próximos días revisar las etiquetas de los productos que compremos, que vayamos a consumir ya que podríamos estar adquiriendo en el futuro alimento contaminado con radiación, como están las cosas es mejor evitar riesgos y protegernos como esté a nuestro alcance, porque sabemos que la élite es sin escrúpulos y ya algunas naciones han comenzado a aprobar la importación de estos productos japoneses para «ayudarles a salir de la tragedia» , ya si suceden catástrofes o que inevitablemente a través del viento el aire contaminado llegue a nuestros lugares de origen pues ya ni modo, ya son cosas que se salen de nuestras posibilidades de control, no nos queda más que orar por los japonesitos que la están pasando mal, hoy son ellos, quien nos garantiza que mañana no seamos nosotros los afectados, que Dios nos ampare y proteja.

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