Hace tiempos publiqué de un ladrón que portaba un arma en la mano con la que amenazó a su víctima, quedó bloqueado e indefenso después de que la propia víctima lo reprendiera en el nombre de Dios y empezara a obrar una especie de exorcismo. En esta ocasión se trata de algo similar ocurrido en Venezuela cuando los trabajadores de una zapatería cristiana comenzaron a orar y a reprender a dos ladrones que armados entraron a robar. El propietario gritó: “La sangre de Cristo tiene Poder” y uno de ellos cayó muerto.
El hecho inusual sucedió en la ciudad Valle de la Pascua. Mientras cometían el delito, los empleados comenzaron a orar, sin embargo el propietario, quien es evangélico, comenzó a gritar varias veces: «La sangre de Cristo tiene Poder«, y de repente uno de los ladrones sufrió un paro cardíaco y cayó al piso.
La víctima fue identificada como Ronner Eduardo Muñoz Arrieta de 24 años de edad apodado “El Babo” y residía en el barrio La Tormenta.
